Servicios funerarios. Un poco de historia: el cementerio de Albacete

Las empresas de servicios funerarios somos testigos de cómo, a diario, muchas personas nos encargan sus lápidas o acuden con dolor al tanatorio y, en su caso, al crematorio.

Sabemos lo importante que es, para las personas que han perdido a sus seres queridos, pensar que sus familiares y amigos van a tener descanso en un lugar confortable. Aunque existen numerosas opiniones y creencias, todos nos sentimos más reconfortados frente a la muerte si tenemos la convicción de que sus restos reposarán en un lugar santo. El lugar santo por excelencia, aunque no supone el único, es el cementerio.

Cada cementerio es especial para quienes lo visitan. Hoy queremos explicar la historia del cementerio de nuestra ciudad: Albacete. Así nació el cementerio de Albacete.

Monumentos y celebridades rinden homenaje en el cementerio de Albacete

Los cementerios son unos de los rincones más llenos de historias y recuerdos. El cementerio de Albacete no se queda atrás y, entre sus mármoles y granitos, se levantan monumentos y tumbas de personajes célebres e históricos. Pero comencemos conociendo cuándo y cómo surge este cementerio.

Es conocido popularmente como cementerio de Albacete porque es el único cementerio de la capital. Pero su nombre completo es Cementerio Nuestra Señora de los Llanos de Albacete. Alberga unas 20 héctareas, en las cuales están enterradas más de 90.000 personas.

Inauguración del Cementerio de Albacete

Desde que se inauguró, en 1806, ha experimentado sucesivas reformas y ampliaciones. La última reconstrucción fue en 1879. Fue el monarca Carlos III, quien motivó, a través de una legislación en la cual prohibía enterrar en las iglesias, la construcción del cementerio.

Situado al noreste de Albacete, se divide en nueve patios. En ellos se halla un total de unas 40.000 sepulturas, entre las que se incluyen nichos, fosas y panteones.

Servicios del Cementerio de Albacete

Además de contar con los tradicionales servicios de tanatorio, crematorio o cafetería (entre otras dependencias) y la iglesia principal del cementerio, un lugar especialmente destacado es la Capilla del Santísimo Cristo de la Misericordia. En donde descansan los restos de los antiguos alcaldes de la ciudad, promotores de la edificación del camposanto.

Monumentos especiales del cementerio

Especialmente emotivo es el tributo a las víctimas de guerra, con el Monumento a los Caídos. Este monumento lleva en el cementerio de Albacete desde el año 2003, cuando fue trasladado de su anterior sede, el Parque Abelardo Sánchez. Adornado con flores de colores, este monumento representa la bandera republicana.

Otro pedazo de historia es el monolito en recuerdo de 94 albaceteños que fueron asesinados por los nazis en los campos de concentración. Pero no son los únicos hitos. Hay muchos personajes ilustres que comenzaron su sueño eterno en este lugar: Margarita Ruiz de Lihory y Resino, Pedro Monzón (fundador del Albacete Balompié) y toreros y arquitectos de prestigio, como Chicuelo o Julio Carrilero.